Mis inicios en bicicleta:
Aprendí de muy pequeña a montar en bici en mi pueblo, Miedes de Aragón. Allí la bicicleta siempre fue mi medio de transporte por excelencia: para ir a las piscinas, al local con los amigos, o de excursión a los pueblos de alrededor…
Seguí utilizándola como medio de transporte en las ciudades en las que he vivido después: Barcelona y Zaragoza. Así que siempre he estado vinculada a la bici.
Pero no fue hasta el año 2016 cuando Daniel me regaló mi primera bici “buena”: una KTM de aluminio de 27,5”, 750€ y 14 kilos. Por supuesto de montaña, ya que para mí era la modalidad de ciclismo más “natural”:
Por aquel entonces yo hacía running y empecé a combinarlo con rutas de 40-50 km a modo paseo. Enseguida le cogí el gusto y empecé a correr mis primeros duatlones, donde me di cuenta que la bici se me daba muy bien en relación con las otras chicas.
Mi primera bici de carretera llegó en 2017: una Orbea Orca de segunda mano: carbono, Shimano 105 y 650€.
Antes de tener la bici ya me había inscrito a la Treparriscos (la hermana pequeña de la QH) que terminé con éxito. Y ese mismo verano hice mis primeros grandes puertos, entre ellos uno que tenía muy claro que quería subir incluso antes de tener bici: El Angliru.
A partir de ahí organizamos las vacaciones para hacer cicloturismo y seguir coronando grandes puertos: Pirineos, Alpes Franceses, Alpes Italianos y Alpes Suizos son sólo algunos de nuestros destinos.